Este mes se ha dado uno de los pasos más importantes en cuanto a la detección de la fibromialgia, algo que hasta el momento es complicado debido a la multiplicidad de síntomas y falta de pruebas diagnósticas específicas.
Investigadores de la Universidad Estatal de Ohio, en Estados Unidos, han conseguido detectar, por primera vez, la 'firma molecular' de la fibromialgia, y para ello, están desarrollando un análisis de sangre capaz de detectar con precisión la enfermedad.
El estudio, publicado en el Journal of Biological Chemistry, abre el camino para un diagnóstico "simple y rápido". Los expertos, además de conseguir identificar de biomarcadores de la fibromialgia, han conseguido con estos marcadores diferenciarla de otras enfermedades relacionadas.
El descubrimiento podría ser un punto de inflexión importante en la atención de los pacientes con una enfermedad que a menudo se diagnostica erróneamente o no se diagnostica.
La identificación de biomarcadores de la enfermedad (huella dactilar metabólica) como la que se descubrió en el nuevo estudio, también podría abrir la posibilidad de tratamientos dirigidos. “Encontramos patrones metabólicos claros y reproducibles en la sangre de docenas de pacientes con fibromialgia. Esto nos acerca mucho más a un análisis de sangre que nunca”, dijo el investigador principal Kevin Hackshaw, profesor asociado en el Colegio del Estado de Ohio de medicina y un reumatólogo en el centro médico de la universidad Wexner.
Para diagnosticar la fibromialgia, los médicos evalúan los síntomas del paciente, su historia clínica y haciendo una evaluación física del dolor, centrándose en puntos sensibles específicos. Pero no hay un análisis de sangre, no hay una herramienta clara y fácil de usar para proporcionar una respuesta rápida.
Aunque la fibromialgia es actualmente incurable y el tratamiento se limita al ejercicio, la educación y los antidepresivos, un diagnóstico preciso tiene ventajas como el descarte de otras enfermedades, la confirmación a los pacientes de que sus síntomas son reales y no imaginados, y guiar a los médicos hacia el reconocimiento de la enfermedad y el tratamiento adecuado.
Hoy, la mayoría de los médicos no cuestionan si la fibromialgia es real, pero todavía hay escépticos", ha señalado el investigador, quien recuerda que a muchos pacientes no diagnosticados se les recetan opioides que no han demostrado beneficiar a las personas con la enfermedad.
"Cuando observan clínicas de dolor crónico, aproximadamente el 40% de los pacientes que toman opioides cumplen con los criterios diagnósticos de la fibromialgia. La fibromialgia a menudo empeora, y ciertamente, no mejora con los opioides".
Por otro lado, este trabajo podría llevar a la identificación de una proteína o un ácido en particular, o una combinación de moléculas, vinculadas a la fibromialgia.
Además de identificar la fibromialgia, los investigadores también encontraron evidencia de que la técnica de huellas dactilares metabólicas tiene el potencial de determinar la gravedad de la fibromialgia en un paciente individual. "Esto podría llevar a un tratamiento mejor y más dirigido para los pacientes”, ha conclido Hackshaw.
Referencia
Metabolic fingerprinting for diagnosis of fibromyalgia and other rheumatologic disorders.
J Biol Chem. 2019 Feb 15;294(7):2555-2568. doi: 10.1074/jbc.RA118.005816. Epub 2018 Dec 6.